¿La verdad tras "el robo del siglo"? | Opinión: "Museo"

Diciembre, 1985. Tres meses después del terrible sismo ocurrido en la Ciudad de México, las familias mexicanas se disponen a celebrar la Nochebuena sin saber que, en la mañana de Navidad, mientras los niños se disponen a abrir los regalos, despertarían con una noticia inesperada: han robado 141 piezas invaluables del Museo Nacional de Antropología. Eso y mucho más se ve en Museo: la nueva cinta de Alonso Ruizpalacios, galardonada con el Oso de Plata a Mejor Guión en el Festival de Cine de Berlín.

El entusiasmo por esta película ha crecido de manera exponencial desde el anuncio oficial de la misma: algunos por el regreso de Gael García Bernal al cine mexicano y otros, como el que escribe esta entrada, significa la llegada de una nueva película de Ruizpalacios pues, después de su debut como director con Güeros (2014), se ha posicionado como uno de los directores más importantes —incluso me atrevería a decir que influyentes— de la cinematografía mexicana actual.

Juan (Gael García) y Benjamín (Leonardo Ortizgris) son mejores amigos desde la infancia y ahora estudiantes de veterinaria que viven en Satélite: una zona residencial a las afueras de la Ciudad de México. Tras un trabajo de investigación minucioso, Juan le propone a Benjamín que entren a escondidas durante la noche al Museo Nacional de Antropología para robar la mayor cantidad de reliquias que puedan para así, obtener una suma bastante considerable de dinero, pero sin saber las consecuencias que traerían consigo.

Como se ha venido presumiendo desde el anuncio del filme, es una historia basada en un hecho real: realmente dos estudiantes de veterinaria entraron al Museo de Antropología y robaron todo lo que pudieron. Sin embargo, Museo no es una "película basada en hechos reales" común y corriente. En este filme, más allá de saber los detalles sobre el robo, Ruizpalacios explora a través de ese suceso la propia identidad mexicana, así como la supuesta importancia que la sociedad le da a su legado histórico y cultural, y conforme transcurre la cinta, uno se percata de ese mensaje.

La facilidad que tiene Ruizpalacios para desarrollar una historia se plantea nuevamente en Museo. Es increíble la capacidad que éste tiene para la natural interacción entre los personajes, justo como llegó a suceder con su anterior filme Güeros. Maneja un sentido del humor muy ácido y único que sólo él sabe manejar a la perfección, y la mejor manera de exponerlo es a través de las actuaciones de Gael García y Leonardo Ortizgris: aquella dupla es magnífica.

Pese a que Gael es el protagonista y Ortizgris es lo que algunos llamarían sidekick, ninguno se encuentra opacado por la actuación del otro: la forma en que se complementan es muy bien lograda. Por un lado, Juan es una persona calculadora, rebelde, indiferente y hasta cierto punto egoísta; mientras que Benjamín —quizás mi personaje favorito de la película— es una persona frágil, débil, insegura y asustadiza, y la combinación de ambos da por resultado una lucha de opuestos constante que ayudará al buen desarrollo de la trama.

El diseño sonoro es uno de los puntos más fuertes del filme: desde la edición de sonido, hasta la banda sonora. A pesar de que se encontrará disponible en la plataforma de YouTube, Museo se tiene que ver en una sala de cine para apreciar de manera total el trabajo auditivo del filme. El uso que se le da a La noche de los mayas de Silvestre Revueltas le dota de mayor epicidad y dramatismo que ya de por sí tiene la película.

Realizada por Damián García, la fotografía es un trabajo bastante bueno: el uso de los colores vivos contrasta con la dureza de la historia, además de que resulta ser un buen recurso para ambientar al espectador al triste 1985 de México. La fijación que se tiene por hacer dolly-in hacia objetos o partes del cuerpo es una característica más que define el estilo de Ruizpalacios y funciona bastante bien.

Museo es una de las mejores películas que ha dado el cine mexicano en los últimos años. Es un trabajo muy bien ejecutado, no con el fin de explicar propiamente los hechos del robo del Museo de Antropología, sino para recordarnos a los mexicanos lo que implica la existencia de esas piezas en un recinto como ese.

Museo se estrena en diversos cines de México y en Youtube Premium el 26 de octubre de éste año.

— Daniel Maraz